El PP ataca a Oleguer a través de Kelme

Kelme se ha visto sorprendida por la dimensión que ha adquirido su decisión de retirarle el patrocinio a Oleguer -"no pensábamos que podría tener tanta trascendencia", admitió Pepe Quiles, uno de sus fundadores-, pero defendió su libertad para prescindir de la imagen de Oleguer.

"No queremos que alguien que viste y calza Kelme exponga opciones políticas o enfrentamientos políticos", explicó el empresario, justificando su medida. "Queremos deportistas que hagan comentarios alrededor del deporte, no permitimos que hable de otras cosas que no sean deporte. Le contratamos y le pagamos para eso", concluyó Quiles.

Benjamín Clarí Oltra, consejero delegado de Kelme desde hace tres meses, aseguró ayer que debido al artículo escrito por el jugador su empresa había recibido cancelaciones de "pedidos de botas de fútbol que llevan el nombre de Oleguer".

El futbolista nunca ha llevado su nombre impreso en la bota. Oleguer negoció con la firma alicantina el lanzamiento de su modelo propio de calzado, pero las conversaciones no fructificaron. El cambio de interlocutores, por los movimientos internos de la firma de Elche, dificultó los contactos.

LA PATRIA FINANCIERA

La empresa Kelme fue fundada en 1977 por los hermanos Pepe y Diego Quiles. Ambos apostaron enseguida por el ciclismo como principal herramienta publicitaria para lanzar los productos, que tuvieron una buena acogida en los 80 en Latinoamérica, sobre todo en Colombia. También apoyaron a diversos equipos de fútbol, como el Real Madrid. Una apuesta errónea, el lanzamiento en el mercado ruso, llevó a la familia Quiles a la bancarrota.

Fue entonces cuando llegó la ayuda de la administración autonómica valenciana, que para eso está, en la época en la que Eduardo Zaplana era el presidente de la Generalitat valenciana. Las vinculaciones del entorno de Kelme con el Partido Popular siempre fueron muy estrechas. Prueba de ello era la militancia en el PP de Vicente Belda, el director deportivo de la escuadra ciclista, entre otros directivos.

La crisis, a pesar de la inyección de un crédito de nueve millones de euros del Gobierno autonómico, que asumieron Bancaixa y la CAM, obligó a la empresa a despedir a buena parte de la plantilla, según denunció ayer a este diario Pascual Pascual, secretario general de Comisiones Obreras en Elche. "Las indemnizaciones se negociaron a la baja, por debajo de los 45 días por año trabajado. Mucha gente se quedó sin empleo, puesto que la ayuda de la Generalitat conllevó que toda la producción de calzado y ropa se realizase en países asiáticos".

CONTROL AUTONóMICO

Desde entonces, el Gobierno valenciano ha controlado a la empresa. La persona responsable ha sido Enrique Pérez Boada, director del Institut Valencià de Finances y destacado miembro del PP y el Opus Dei valencianos. Hace tres meses fue nombrado un nuevo consejero delegado, cargo que recayó en la figura de Benjamín Clarí Oltra, que llegó a la cúspide de Kelme después de haber sido el presidente de Adidas Iberia.

Clarí Oltra fue la persona que firmó la rescisión del contrato de Oleguer. "Sus declaraciones han afectado negativamente a la marca. Queremos deportistas que se dediquen a la práctica de su profesión. Si quisiéramos gente que hablase de política, patrocinaríamos a políticos", insistió ayer el ejecutivo.

RETRASOS EN LOS PAGOS

Kelme, en sus años en el mundo del ciclismo, mantuvo diversos contenciosos con sus corredores debido a los retrasos en el pago de las nóminas. Estas demoras no han variado. Algunos de los deportistas a los que patrocina siguen sin cobrar los acuerdos pactados.

Oleguer no sería la excepción. El futbolista no había recibido ayer todavía la confirmación oficial sobre la cancelación de su patrocinio.

Extractado por La Haine