Gran movilización en Barcelona el 1º de mayo a pesar del macrodispositivo policial

El 1º de mayo en Barcelona de este año, se recordará porque, a pesar de las amenazas, intimidaciones, la gamberrada de requisar pancartas y banderas, intensos controles policiales y, en conclusión, el revanchismo policial y la política del miedo de Felip Puig y el gobierno, miles de personas salieron a la calle a recordar a los 5 obreros de Chicago, continuar su lucha y reclamar la libertad de las cuatro huelguistas presas.

CNT-AIT y CNT-Catalunya convocaron manifestaciones y actos por la mañana. Después, por la tarde, más de 20.000 personas (según varias fuentes) se congregaron en la manifestación anticapitalista. Allí se pudo ver la presencia de varios sindicatos, trabajadoras en lucha con conflictos, el bloque de la izquierda independentista -cuya pancarta principal la sostenían varias personas que aparecían en la web de los mossos d'esquadra fichados por los hechos del 29M- y a la cola de la manifestación se encontraba el bloque libertario, tras la pancarta: Contra el sistema, acció directa.

Los Mossos d'Esquadra y el Departament d'Interior desplegaron un macrodispositivo extraordinario que contaba, además, con numerosos policías secretas encapuchadas que intentaban intimidar a las personas que se dirigían a la manifestación. Se podían ver retenciones, identificaciones y registros en las calles que accedían a la Plaça Universitat, en donde se había dado cita a las 17.30hs. También cerraron las estaciones de metro de la misma plaza una hora y media antes y en muchos puntos o incluso edificios (como fue el Teatre Apolo) agentes grababan con cámaras de vídeo a quien se encontrase en la calle.

En más de una ocasión, las manifestantes echaron a las agentes infiltradas que agredían y provocaban a la gente. Se llevaron con ellas a tres personas detenidas que fueron puestas en libertad el mismo día.

Como explica La Directa: “El macrooperativo estaba conformado por ocho unidades de la Brigada Móvil con 49 agentes cada una y otras siete unidades de ARRO (provenientes de las regiones policiales de toda Catalunya), que sumaban 350 antidisturbios más. También hay que añadir la numerosa presencia de policías de paisano, que, contrariamente a lo que pensaron muchas manifestantes, no eran de la División Central de Información. Los más de 300 efectivos no uniformados activados para la ocasión provenían de las unidades de seguridad ciudadana de los diez distritos de Barcelona, ​​que, durante horas, dejaron el conjunto del municipio sin la presencia policial habitual en la mayoría de barrios. Son policías que habitualmente patrullan con uniforme por los barrios de la ciudad y por eso quisieron -para evitar ser reconocidos una vez retornaran a su trabajo habitual- ocultar su identidad detrás de una capucha o un pasamontañas. El brazalete fluorescente era una herramienta de identificación interna, ya que muchos de ellos no se conocían entre sí por estar destinados a unidades y distritos diferentes".

Después de la manifestación anticapitalista que acabó en La Canadenca, varias manifestantes se concentraron ante la comisaría de Les Corts para dar apoyo a las personas detenidas.

Se demostró una gran madurez entendiendo que “se ha de ser yunque cuando toca resistir y ya se será martillo cuando toque golpear”.

Los "check points" en Barcelona continuan estos días, por motivo de la convocatoria de Felip Puig contra la Cumbre del Banco Central Europeo. Se han convocado caceroladas en los diferentes barrios de la ciudad.

Fotos: Diagonal y activestils.org