Valencia: La policía carga contra cientos de inmigrantes que jugaban un campeonato de futbol

La asociación Rumiñahui exige explicaciones por la actuación de los agentes

Levante -emv- Paco Varea, Valencia

La final de la Liga de Integración Rumiñahui 2003-04, que se celebró en la tarde del pasado domingo en los campos de fútbol del Jardín del Turia, en el tramo VI, no se desarrolló, precisamente, con las estrofas de «We are the champions» de Queen.

Todo lo contrario. Dieciséis agentes de la Policía Local de Valencia se desplegaron en el campo sobre las 19,50 horas, justo en el momento de la entrega de trofeos y a la misma hora que la alcaldesa y parte del equipo de gobierno presenciaba a pocos metros la Batalla de Flores, en el Paseo de la Alameda.

Los agentes dispersaron a las 1.000 personas que estaban, la mayoría de países sudamericanos, argumentando que «provocaban molestias por escuchar música a gran volumen con un potente equipo conectado a un grupo electrógeno», según una nota oficial de la Policía Local.

En esa misma nota el cuerpo de seguridad local explica que: «Los efectivos de la Policía Local después de requerir a los responsables la preceptiva autorización municipal para realizar este tipo de concentración, procedieron a la incautación de un grupo electrógeno e invitaron a los allí congregados a que cesaran con las molestias a vecinos y usuarios de esta zona verde». Los efectivos policiales ya habían intervenido, en otras ocasiones, en otros lugares del Jardín del Turia para acabar con las molestias de esas actividades deportivas aunque antes editaron folletos explicando las normas de la mano de la Federación de Vecinos.

Un portavoz policial explicó que «en modo alguno los agentes entraron en el campo en tromba ni dañaron a nadie. Se acudió ante las quejas por el elevado volumen de la música». El presidente de la Asociación Rumiñahui, Edgar Constante, exigió ayer explicaciones a la delegación del Gobierno y por la actuación policial.

El responsable de la organización dijo que «los hechos están fotografiados y filmados por nuestros propios compatriotas. La policía irrumpió con porra en mano a agredir, requisar y sustraer parte de los materiales. La policía cargo contra la multitud sin importarle la presencia de niños». Al final, la copa la recibió el equipo «Amazonas».