Desalojan a activista que lleva 36 días en huelga de hambre en un banco “rozando la tortura”
El pasado 23 de Mayo en Pl. Catalunya desaloja la Guardia Urbana, en clara connivencia con el Ayuntamiento de Barcelona de Ada Colau a una acampada que lucha por la remunicipalización. de los servicios sociales, esta plataforma participe en el 7º aniversario del 15M junto a asambleas, colectivos…
Tras conocer la notícia, nos hemos puesto en contacto con miembros de la Acampada pels drets, desalojada el pasado 23 de May0.
Nos trasladan su inquietud por la falta de derechos durante dicho desalojo en el que aseguran que reinaba el abuso de autoridad, la denegación de socorro y la sustracción de enseres durante dicha intervención.
Aproximadamente, a las 8:15 de la mañana, más de 20 agentes de la Guardia Urbana de Barcelona, irrumpieron coordinados con los servicios de limpieza municipal en Pl. Catalunya, para desalojar y erradicar la protesta pacífica que lleva desarrollándose mediante una huelga de hambre de ya más de 37 días por parte de un Activista, que coincidiendo con el 7º aniversario del 15M, habían organizado una jornada lúdico/festiva, de carácter totalmente pacifista y reivindicativo, con la participación de más de 40 colectivos y asambleas del propio movimiento.
Durante este proceso los activistas allí concentrados, solicitaban reiteradamente un Informe de Acopio de todo lo sustraído, y la activación del protocolo médico para el seguimiento de las huelgas de hambre.
Miembros de dicha acampada, nos aseguran que el desalojo se ejecutó en apenas diez minutos, destrozando material de colectivos del 15M a su paso, mientras seguían reiteradamente solicitando el informe de acopio.
En ningún momento se les dejo salvaguardar sus enseres personales, es más, en varias ocasiones, después de rescatarlos, al girarse, comprobaban que se les había vuelto a retirar. Ante la solicitud de quedarse con enseres privados, el mando del dispositivo se negó tácitamente a ello, sustrayendo esos enseres.
También denuncian el abuso de autoridad al que fueron sometidos por parte de dicho mando de la Guardia Urbana al burlarse reiteradamente del compañero en huelga de hambre con frases vejatorias y humillantes poniendo en duda dicho compromiso de huelga de hambre, mientras se le negaba el seguimiento médico de la misma, se avisa a la ambulancia a petición del activista en huelga de hambre y se vuelve a incidir a los servicios médicos de urgencias que acuden la solicitud de activación del protocolo a seguir en estos casos y que a día de hoy sigue sin aplicarse.
Asimismo nos informa la persona en huelga de hambre que a día de hoy no se les ha entregado un informe de acopio, y cinco horas después de dicha intervención policial, se les hace entrega de un acta llena de falsedades y falacias indicando que el activista en huelga de hambre no quería firmar , más cuando nos asegura que no se le ofreció dicha opción.
Para terminar de perfilar este artículo, cerca de las dos de la madrugada, cansado y sin batería en mi móvil, sentado en la misma Pl. Catalunya, veo con asombro como de nuevo irrumpen dos coches de la Guardia Urbana, en el mismo lugar donde se sigue la huelga de hambre, en la que puedo comprobar no sólo el abuso de autoridad, sino también la falta de aplicación de protocolos internos, normativas y leyes que dictan las Ordenanzas Municipales al intentar robarles todos los enseres personales que les quedaban, obligando al activista en huelga de hambre y a dos sin techo a dormir únicamente sentados en un banco, poniendo un dispositivo durante más de dos horas y media, tiempo en el que me fui porque ya tenía transporte. Dicho dispositivo en guardia, les “invitó” a únicamente poder dormir sentados en el banco. Con mis propios ojos y oídos, pude comprobar como este activista seguía pidiendo en informe de acopio y no solo eso exigía que reflejase el numero de placa del mando e indicase que se les sustraía todos sus enseres personales contra su voluntad (cosa que a mi entender tiene bastante conocimiento) además de pedir la identificación al mando varias veces del operativo, que aunque desde la distancia no pude comprobar parece que no portaba el número de TIP obligado a llevar visible para cualquier miembro del cuerpo policial.
Finalmente, tras media hora al móvil el mando del dispositivo, solo se retiran dos cosas en Pl. Catalunya: Un palet que recoge un guardia urbano y un buen número de lazos amarillos de la zona donde estaba situada la acampada per la República.
Aunque hoy, lo que no me está dejando descansar es haber presenciado como los que supuestamente tienen que defender a los ciudadanos, les cueste tan poco vulnerar derechos humanos, con todo un conjunto de acciones represivas más propias de un régimen totalmente autoritario.